A lo largo de la historia se ha demostrado que el aceite de semillas de cáñamo tiene múltiples beneficios para la salud.
¿Cómo afecta en la piel?
Al tener elementos como la Vitamina E, antioxidantes y ácidos grasos, tiene efecto calmante sobre la piel y la protege de los agentes externos que son nocivos. Además, también tiene un papel importante sobre la regeneración de las células, ayudando a que no se consuma el colágeno y previniendo el envejecimiento de la piel.
El cáñamo se adapta a cualquier tipo de piel, aportando hidratación, prevención, nutrición y un efecto calmante muy beneficioso. ¡Es un ingrediente natural de lo más versátil!
¿Cómo actúa el cáñamo en la piel?
En la piel, igual que en otras partes del cuerpo, hay receptores de cannabinoides (CB1 y CB2). Estos forman parte de un sistema endocannabinoide que está implicado en el mantenimiento de la homeostasis de la piel, así como la función barrera de la misma a través de su activación a nivel, por ejemplo, de las glándulas sebáceas.
Los receptores CB1 y CB2 se encuentran a distintos niveles de la piel: queratinocitos de la epidermis, sebocitos de la glándula sebácea, folículo pilo sebáceo o en células sensoriales en la dermis. El sistema endocanabinoide está implicado en distintos estados y/o patologías cutáneas como la sequedad cutánea o el acné por su acción sobre los sebocitos. Según algunas fuentes, el cáñamo actúa como adaptógeno, lo que significa que es capaz de aumentar la capacidad de adaptarse a factores ambientales y evitar el daño causado por los mismos.