Desde la antigüedad, se sabe que el sueño es fundamental para la salud y el bienestar. Sin embargo, en la cultura occidental moderna, el sueño ha pasado a un segundo plano.
Se estima que el 30% de los adultos no tiene un buen descanso (National Sleep Foundation). Los problemas del sueño no solo afectan nuestro bienestar físico y mental, sino también nuestro rendimiento laboral y social. Un descanso adecuado es la base de un estilo de vida saludable.
¿Qué es el sueño y por qué es importante?
El sueño es un descanso necesario para la mente y el cuerpo. Nos permite descansar y descargar tanto nuestro estrés mental como físico. A pesar de que muchas personas descuidan su descanso para completar proyectos u obligaciones, el descanso adecuado ya sea durante la noche o durante siestas regulares es necesario para mantenerse saludable mental y físicamente. Cuando descansamos adecuadamente no solo nos sentimos mejor cuando despertamos, sino que también nos encontramos con mayor vitalidad y energía para enfrentarnos a las múltiples responsabilidades de nuestras vidas cotidianas.
La calidad del sueño es algo que debemos prestar atención porque puede tener un gran impacto en nuestras vidas. Tanto si sales demasiado tarde como si duermes demasiado, cualquier cambio significativo en la calidad del sueño tendrá efectos negativos en tu salud y tu estado de ánimo. El descanso adecuado se ha convertido en algo vital para que nos sintamos felices y satisfechos con la vida que llevamos. Si solo podemos descansar adecuadamente, no solo mejoraremos nuestra productividad, sino que también mejoraremos nuestro estado de ánimo y disminuiremos los efectos nocivos de desórdenes como el insomnio o e hipersomnia.
¿Cómo afecta el sueño a nuestra salud?
El sueño es un elemento fundamental para nuestra salud y bienestar. Si no estamos durmiendo lo suficiente, nuestro rendimiento general disminuye, nuestro sistema inmunológico enfrenta el desafío de combatir los microbios o virus que ingresan a nuestro cuerpo, y nuestro cuerpo puede no producir los niveles necesarios de hormonas responsables de controlar los procesos metabólicos. La falta persistente de sueño también afecta la memoria y el procesamiento del cerebro, lo que resulta en una disminución gradual de su capacidad para concentrarse y retener información con facilidad. Finalmente, en situaciones más graves, la falta de sueño puede ser perjudicial para tu salud mental. Por lo tanto, es importante tener buenos hábitos de sueño para mantener un equilibrio entre tu mente y tu cuerpo, es decir, un sueño de calidad; Hace referencia a tener un sueño profundo, restaurador e ininterrumpido que nos proporciona descanso físico y mental. Durante este periodo, nuestro cuerpo y mente se relajan y reparan todos los daños causados por el estrés del día anterior.
Las 4 fases del sueño
Durante el sueño, el cuerpo se relaja y la actividad cerebral disminuye. Esto permite que los músculos del cuerpo se relajen y que la mente descanse. El sueño se divide en varias etapas:
- La primera etapa de sueño es la etapa de somnolencia, donde comienza a disminuir la actividad mental y física. Esta etapa dura entre 5-10 minutos.
- La segunda etapa del sueño es conocida como "sueño ligero". Durante esta etapa, los latidos cardíacos y respiratorios disminuyen, los músculos se relajan aún más y hay menos movimiento corporal. Esta etapa dura entre 10-25 minutos.
- La tercera etapa del sueño es conocida como "sueño profundo". Durante esta etapa, los latidos cardíacos y respiratorios son lentos, los músculos están completamente relajados y hay una reducción significativa en el movimiento corporal. Esta etapa dura entre 25-50 minutos.
- La cuarta etapa del sueño es conocida como "movimiento rápido del ojo" (REM). Durante esta fase, la actividad cerebral aumenta nuevamente al nivel del estado de vigilia, pero hay una reducción significativa en el movimiento corporal. Esta fase también puede ser llamada "sueño paradójico" porque durante este tiempo su cerebro está activamente procesando información, pero sus músculos permanecen paralizados para evitar que actúes sobre tus sueños. Esta fase dura entre 50-90 minutos.
El ciclo completo de las cuatro fases del sueño generalmente toma entre 90-110 minutos para completarse antes de volver a empezar desde el principio. El descanso adecuado ayuda a mantener nuestra salud mental y física al permitir que nuestro cerebro procese información, recupere energía y nos prepare para afrontar las demandas del día siguiente.
¿Qué puedes hacer para mejorar tu sueño?
Para mejorar la calidad de tu sueño, los expertos recomiendan hacer algunos cambios en tus hábitos diarios.
- Incluir más actividad física durante el día puede ayudar a apoyar un buen descanso nocturno; trata de tener al menos 30 minutos de ejercicio autónomo todos los días.
- Considera controlar tu dieta para reducir la ingesta de ciertos estimulantes como café y azúcares artificiales, optando por alimentos más ricos en nutrientes. Una ración extra de frutas frescas, verduras y grasas saludables puede mejorar tanto tu energía cómo tu sueño. ¡Experimenta con tus hábitos y alimentación para ayudarte a dormir mejor!
- Tratar de irte a la cama temprano todas las noches para obtener al menos entre 7-9 horas de descanso.
- Evitar bebidas estimulantes como cafeína después de las 16:00.
- Cambiar la exposición a pantallas brillantes antes de acostarse por alguna actividad relajante, como leer un libro antes de acostarse.
Los beneficios del sueño para nuestro bienestar
Dormir regularmente es fundamental para el bienestar físico y mental. La falta de sueño mengua nuestro ánimo y genera cambios en nuestras emociones, como ansiedad e irritabilidad, lo que disminuye la concentración y la productividad. Por el contrario, dormir un descanso suficiente contribuye al equilibrio emocional, mejora las habilidades cognitivas y aumenta los niveles de energía. Los beneficios del sueño se pueden sentir a corto plazo al permitirnos ser más activos durante el día; a largo plazo, obtendremos menos problemas relacionados con la salud si somos consistentes con un horario de sueño saludable. Por lo tanto, debemos tener siempre en cuenta los beneficios del descanso adecuado, para garantizar el bienestar personal.
Las consecuencias de no dormir lo suficiente
Las consecuencias de no descansar adecuadamente pueden ser graves. Cuando nos privamos del sueño necesario para nuestra salud, el resultado inmediato es la fatiga y la falta de claridad mental durante el día. Estas son solo un par de efectos, pero no dormir lo suficiente puede tener implicaciones más profundas a largo plazo en nuestra salud mental y física. Incluso cuando dormimos mal, los efectos dañinos en nuestro cuerpo son submarinos, comenzando con problemas cardiovasculares debido a una mala regulación del azúcar en la sangre y conduciendo a otras complicaciones de salud como la diabetes y el aumento del estrés. Además, según estudios recientes también puede haber un mayor riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer o demencia si no obtenemos los elementos importantes que forman parte de nuestro descanso reparador diario.
En resumen, el sueño es una necesidad básica para nuestra supervivencia y bienestar. Tiene un gran impacto en nuestra salud, y descansar y dormir lo suficiente son fundamentales para conservarla. Hablando de los beneficios del sueño, nos ayuda a mantener la productividad, mejorar la memoria, reducir la ansiedad y las enfermedades cardíacas. Además, no obtener el sueño adecuado también puede influir en nuestro rendimiento físico y mental. Por esta razón, hay que tomar medidas como evitar usar teléfonos móviles antes de acostarse para mejorar la calidad del sueño. Otras formas de alcanzar un mejor descanso son desconectarse de las principales obligaciones durante el fin de semana o intentar dormir temprano. Sea cual sea tu caso, con un buen descanso podrás estar preparado para disfrutar plenamente del día siguiente.
